Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 14-10-2010
Si la playa de las Catedrales era una romerÃa, el pueblo de Cudillero no se le queda atrás. Prácticamente lo mas turÃstico de la zona, totalmente orientado al visitante, si te buscas un ángulo que más o menos disimule algo, aún puede salir una foto medianamente aceptable.
Si no buscas un ángulo que disimule, sale foto de romerÃa total. Menuda marabunta habÃa aquà también.
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 10-10-2010
Ya que en esta entrada me pedÃais ver los alrededores de la ermita y hoy me pilláis de buenas, vamos a complacer al distinguido público del blog pero no os vayáis malacostumbrando, que una flor no hace primavera. Además me veo obligado a descubrir que de esa zona, la ermita… era lo menos interesante. Para llegar a ella se recorren varios kilómetros al lado del rÃo donde abundan paisajes como el que se puede ver aquÃ.
Una vez dejas el coche y empiezas a subir no mentà ni un ápice, fijaros la subidita con la que me tocó lidiar.
Llegados a cierta altura, toda la ladera de enfrente estaba cubierta de árboles pelados repletos de tonos invernales donde predominaba el violeta.
Y a media subida un mirador permitÃa ver las montañas de Valdezcaray, creo, con las últimas nieves del invierno. Se disfrutó el paisaje bien disfrutado, se sacaron muchas fotos, pero lo de la columna en la ermita fue lo que primero trajo una historia a mi cabeza.
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 08-10-2010
Pues eso, ¿quién no ha sentido alguna vez esa sensación de que el dÃa está gafado? Pongamos un ejemplo, llega uno a un monte perdido en el que ve un cartelito indicando la dirección en que se va a la «Ermita del Santo», en lo alto y con vistas. Coño, qué interesante, esto hay que verlo… compruebo el mapa del cartel y a juzgar por la escala, eso está chupado. Pregunto y ná, un poquito de subida, diez minutos andando. Chupao, esto está chupao. Allá me voy caminando. La parienta, que ya se conoce el percal y no pica en las que pico yo, dice que ella ha venido a hablar de su libro no a cansarse asà que se queda a reposar gentilmente. Ella se lo pierde, si total está aquà al lado… empezamos la subida, inclinación normal. De normal pasamos a notable. De notable pasamos a muy notable. Camino de tierra y piedrecitas que patinan. En un repecho me encuentro con tres que bajan y me dicen que «ya no queda nada». No sé si fiarme… un rato después llego por fin a lo que es la Ermita, en total media hora de caminito en pura subida. El que me dijo que eran diez minutos debÃa tener unas botas de siete leguas o no me lo explico. Sólo pienso en lo bien que hizo una quedándose a disfrutar del paisaje. Y bueno, la «Ermita del Santo» es ésta, aquà permaneció San Millán cuarenta años como ermitaño (o sea, sin internet).
De las vistas no hay queja. Pero claro, llega uno tan cansado que entra, saca la cámara, saca foto, se olvida mirar el resultado y luego en casa, revisándolas, me doy cuenta que una miserable columna espontánea, que de otra forma no se la puede calificar, se me ha colado sigilosamente ante la efigie del santo. Vaya suerte, oiga. Pues os vais a tener que conformar con ésto, porque a mi en esa subidita no me volvéis a pillar…
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 01-10-2010
¿Y cómo es posible un milagro similar al que consiguen éstas tres chicas de Navaluenga, que pasean tranquilamente sobre la superficie del agua? Nada como ir descalzas y caminar por el pequeño muro que hace de presa para concitar la atención de los espectadores a la vez que se refrescan los pinreles.
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 26-09-2010
Dos sitios donde comà en la visita a La Rioja y alrededores hace unos meses, dos resultados totalmente diferentes. Un no rotundo para el «Café Iruña» en Pamplona. Paramos allà por ser de lo mas tÃpico del lugar, por estar muy céntrico en plena Plaza del Castillo, por guardar un recuerdo inmejorable del «Café Iruña» de Bilbao y en cambio aquà el fiasco fue de impresión. Comida de batallón, patatas congeladas a medio descongelar, una cosa llamada «Ragout de venado» tan rimbombante como incomible, hasta el café estaba malÃsimo y eso ya tiene delito. Las cosas de no tener internet a mano, buscando información no será porque no lo avisen. Una decepción como un piano y un sitio donde seguro que no vuelvo, lástima porque el local es precioso.
Un sà rotundo para el restaurante «La Cueva«, en Elciego, y totalmente inesperado. El aspecto exterior es una casona al lado de la carretera. Entramos y el restaurante está en una cueva en el sótano. Fijaros qué aspecto, supongo que será una antigua bodega:
Aquà por lo que pude ver se come generalmente en plan menú. TenÃan dos, uno de 13 y otro de 18 euros. Nos inclinamos por éste último: dos platos, postre, café, bebida, comida fina pero abundante cocinada como dios manda y con buena materia prima, un servicio rápido, 18 euros por todo eso fue un verdadero regalo. Salimos encantados de la vida y con el buche lleno. Un sitio para recomendar con los ojos cerrados.
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 24-09-2010
Hablé aquà ya de la Sierra de Cameros, puse una imagen de Villoslada de Cameros, el pueblo que más me gustó y sin embargo me dejaba en el tintero mi foto preferida. Tal y cómo llegas, aparcas y ésto es lo que ves. Un puente empedrado sobre el rÃo y un montón de casas muy parecidas distribuidas aprovechando la ladera. Una gozada pasear por sus calles (salvo por las cuestas) hasta la iglesia en lo mas alto y desde allà contemplar las vistas.
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 17-09-2010
Toda una obra maestra de la ingenierÃa chimeneil, que será la única solución para alejar del tejado de paja de la palloza los rescoldos del fuego que puedan salir volando, pero estéticamente resulta un zapatazo en los ojos tanto ella como sus dos postes de soporte. Qué se le va a hacer, si estética y efectividad se pegan entre ellas. Se perdona porque el resto de la palloza era espectacular. Van volviendo las ganas de pasar por los Ancares, van volviendo las ganas de visitar Balboa, van volviendo las ganas de pegarse otra comilona como dios manda.
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 13-09-2010
Si este radar de Pamplona te mete una multa por exceso de velocidad, casi mejor deja el volante y ponte a cantar haciéndole competencia a Stevie Wonder porque probablemente estés mas cegato que un topo. Fosforito, ni mas ni menos que pintado de color fosforito verde, visible desde kilómetros y probablemente hasta los aviones que pasan por las cercanÃas lo usen como referencia visual.
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 10-09-2010
Hoy toca otra imagen sacada en Calpe, más concretamente en los Baños de la Reina. Es la Sirenota, la sirena esculpida en la piedra visible desde el paseo marÃtimo. En realidad hay dos figuras, pero como a la de la izquierda no se le ve la cola (en el buen sentido de la palabra), me quedo sin saber si es una segunda sirena hija de la primera sirena, que la tuvo de soltera con un hermoso prÃncipe al que salvó de morir ahogado cuando su barco naufragó y del que se enamoró perdidamente (mmmm… ¿de qué me suena ésto?). Sin embargo, como la raza humana es falsa y digna de poca confianza (y si no que se lo pregunten a mi suegra), el prÃncipe se fue con otra que le llenaba más el ojo y la sirena se quedó de piedra, compuesta y sin novio. La hija de la sirena se quedó de piedra también, pero por solidaridad.
Es una historia triste, pero las cosas hay que contarlas cómo son, nos guste o no.
Escrito por: Jc | Categoría: Al este | Publicado el: 03-09-2010
Si en Balboa tienen un castillo, el castillo está en lo alto y yo tengo una especial querencia por las alturas, el asunto nos lleva a que allá subimos para contemplar las vistas. Pero claro, ¿qué pensarÃais si nada más entrar en el recinto del castillo aparece una cuerda colgada de un árbol de esta guisa? ¿Para qué estará ésto aquÃ? Porque en las pelis de vaqueros cada vez que usaban una cosa de éstas alguien acababa francamente mal.
Peor aún al otro lado, dos excavaciones longitudinales de tamaño persona recien hechas bajo sendos árboles contribuyen a sospechar que allà hay algo raro. ¿Qué será? ¿Qué estará pasando?
Pues nada, pasa que por un lado están haciendo zanjas para llevar el saneamiento y por otro, una mente aviesa vio una cuerda al lado de un árbol, hizo el nudo, sacó la foto y deshizo el nudo a continuación porque siempre hay algún idiota que puede venir después, ponérselo al cuello para sacarse una foto y no quiero yo cargos de conciencia si tropieza y se ahorca en un intento por ganar uno de los premios Darwin de este año.