En la calle El Expolio de Salamanca, al ladito del Archivo General de la Guerra Civil está la entrada a un edificio que si bien por delante resulta de lo mas normal, por la parte trasera es francamente espectacular: la Casa Lis. De noche, con todo iluminado, ya ni os cuento. Se trata de un edificio abandonado durante largo tiempo y rehabilitado en los 90 para convertirlo en museo de Art Noveau y Art Deco. En el interior hay colecciones de cuadros, fotos, figuras de cristal, juguetes, muñecas y un largo etcétera. Tantos, que llegan a aburrir salvo que seas un forofo total. Sea como sea sólo por ver el edificio ya vale la pena los tres euros que cobran por la entrada. Como era de esperar tampoco dejan sacar fotos, ni siquiera introducir la cámara. ¿Cuándo se darán cuenta que las fotos es más y más publicidad gratuita?