Qué funcional, qué funcional

Escrito por: Jc | Categoría: Humor, Orense | Publicado el: 20-10-2010

Si la semana pasada hacíamos referencia al paseo del río al lado del balneario de Riocaldo con aquella entrada llamada «Qué bonito, qué bonito«, hoy vamos a referirnos al mismo lugar, unos metros mas adelante donde podíamos contemplar este banco. No sé si es una obra maestra del mobiliario urbano, un elemento de diseño asimétrico rompedor con la tradición, un desliz a la hora de hacer el plano o que a los curritos les dio la hora del bocadillo en medio de la faena y acabaron como pudieron. Sea como sea, allí no me senté. Por si acaso nada más.


Banco sui géneris

Aunque rebuscando en el archivo fotográfico siempre aparece un roto para un descosido y en Panjón tienen algún diseño que no se les queda atrás, más simétrico que el anterior pero igualmente dudoso en su estabilidad.


Banco de Panjón

Qué bonito, qué bonito

Escrito por: Jc | Categoría: Humor, Orense | Publicado el: 13-10-2010

Llegados al Balneario de Riocaldo, qué bonito, qué bonito, vemos un cartel que pone ruta del río, qué bonito, qué bonito, caminamos por la orilla, qué bonito, qué bonito, hasta ver un molinito, qué bonito, qué bonito.


Molino de río

Llegados al molinito, qué bonito, qué bonito, pasamos al interior, qué bonito, qué bonito, donde notamos un olor, qué asquito, qué asquito, porque algún guarro se alivió, qué asquito, que asquito.


Alivio en molino

Por si te lo preguntabas, esta entrada también se puede cantar a poco que le pongas musiquilla.

Riocaldo

Escrito por: Jc | Categoría: Ocio, Orense | Publicado el: 04-08-2010

Perdido en la Baixa Limia al lado de Lobios está el balneario de Riocaldo, conocido por sus aguas termales, por el río Caldo y porque al lado del balneario hay una piscina donde ya puede estar nevando que sigue saliendo agua calentita para disfrute del personal. Podéis ver cómo estaba a veinte de febrero, con tiempo digamos digno de camiseta, camisa, jersey y cazadora, y no faltaban los cuatro valientes a remojo. Para redondearlo todo se necesitaría una cervecita fresca apoyada en el bordillo, pero mejor no digo nada que luego me llaman señorito.


Piscina de Riocaldo

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.Más información sobre las cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies