Galiciaenfotos.comSin rumbo. Sin prisas. Sin horarios.

A veces las cosas salen al revés por mucho que lo planifiques, a veces las cosas salen al derecho sin siquiera planearlo. De recorrido por la sierra de Cameros, en La Rioja, sorpresa tras sorpresa las horas fueron pasando y cuando nos quisimos dar cuenta aparecimos en el primer pueblo del mundo civilizado, de nombre Anguiano, a las cuatro de la tarde. ¿Habrá algún sitio donde comer por aquí? Vamos a preguntar en este bar. Estaban recogiendo pero una señora mayor muy amable ayudada por una chica negra nos dijeron que nos ponían una mesa en plan rapidito y seguro que algo quedaba para comer. De primero sacaron una especie de habichuelas pequeñas llamadas caparrones que parecen ser típicas de la zona. Impresionante. Espectacular. Con el hambre que traía me hubiera comido la pata de una silla, pero aquello estaba buenísimo. De segundo Lomo a la Riojana, complemento perfecto a los caparrones. Postre, café, quince euros cada uno y casi llorando de alegría por los favores gastronómicos recibidos.

Así que ya sabéis, Anguiano, Bar «La Herradura», caparrones, buen papeo, barato, muy buen trato, 100% recomendable.