Examen de imaginación
Escrito por: Jc | Categoría: Pontevedra | Publicado el: 04-03-2010
Seguimos paseando por Moaña y cerca de la rotonda de los calamares nos topamos con ésto. Y digo ésto no de forma despreciativa como por desgracia es bien habitual en este blog debido a las escasas cuando no nulas capacidades empáticas del que aquà suscribe, sino por total y absoluta incapacidad para describir con exactitud aquello que ven mis ojos mientras mi imaginación se ve sometida a un duro examen de primero de carrera de ochocientos metros obstáculos. ¿Es una obra de arte? ¿Es parte del mobiliario urbano? ¿Es una palmera moderna? ¿Son las lanzas de Orzowei? Dada mi duda (que es una expresión dubitativa, no el nombre de un delantero camerunés) sólo faltarÃa para completar el conjunto monumental una foto kitsch de Doris Day en un pedestal con la inscripción «Qué será, será, güareber güilvÃ, güilvû. Porque por muy bien que esté una obra de arte, para mejorarla siempre estamos a tiempo.
Ahora que me fijo… la sombra de la cosa ésta forma un sÃmbolo del alfabeto japonés que significa «Tonto el que lo lea»… cachis…
Me acordé de tà la semana pasada en Cáceres, cuando estando en el casco histórico nos topamos con una maravila de obra de arte.
En principio, no reparamos en cuánto talento habÃa allÃ… todos pensamos que estaban motando un escenario o un andamio y habÃan dejado las traviesas preparadas y recogidas … pero claro, demasiada casualidad de que estuvieran en el medio de la plaza, todas oxidadas y formando una figura..
Juzgad vosotros mismos 😛
http://www.hoy.es/noticias/200912/18/Media/hirerros.jpg
A mi lo que me desconcierta de la obra de arte es el tablón atravesado en diagonal, creo que eso es sÃntoma de una pulsión sexual oculta en la mente del artista. O eso, o una pista de despegue para monopatines, no sé.
lo cierto es que es una farola y entre esta y el tÃpico diseño de unas «anclas» me quedo con esta…y con 3 halógenos no veas lo que iluminan el contorno
Pues menos mal que por lo menos alumbra, que a veces los diseñadores se centran mucho en el aspecto estético y se les olvida la función primigenia del objeto diseñado, alumbrar en este caso. Ahora rezar porque duren, que con esas formas pueden ser una tentación para el vandalismo.