Hace años, decir Os Peares era poco menos decir «el fin del mundo». La carretera desde Orense debÃa ser un suplicio, aún recuerdo a mi padre hablándome de las mil curvas o que si venÃa un autobús por el otro carril podÃas irte al rÃo directamente. Hoy en dÃa las cosas han cambiado un poquito. Se llega por una buena carretera que sale de Orense, bordea el Miño y continúa hasta Monforte. Como pueblo poquita cosa tiene, pasa la carretera, pasa el rÃo, pasa el tren y por hacerlo mas decorativo, han pintado de azul el puente. Lo bueno que tiene ir con la cámara a la buena de dios y sin expectativas, es que te entretienes con todo lo que vaya apareciendo como ya mostré otra vez.