Galiciaenfotos.comSin rumbo. Sin prisas. Sin horarios.

Hace mucho tiempo que tengo una duda existencial. Si soltara una botella con un mensaje en la desembocadura del río Miño, ¿donde llegaría? Leí artículos sobre el efecto Coriolis según el cual la botella una vez libre debería irse hacia el noreste, sin embargo un  mapa de las corrientes marinas me indica que la botella se iría directa al fondo del Mediterráneo y acabaría en Barcelona. Basta ya de dudas, pasemos a la acción: prepararé tres botellas, con tres mensajes en los que indique una dirección de contacto y las iré soltando al mar con unos días de diferencia. Lo propio sería meter un GPS dentro de cada botella e ir haciendo el seguimiento vía satélite, así que ya sabéis, si alguno se siente especialmente generoso me puede financiar el proyecto porque tras la defunción del coche no estoy para tantas alegrías ni tamaña falta de romanticismo en mis sueños. Las entradas del blog referidas a este tema llevarán la etiqueta «metb» (mensajes en tres botellas) y en la parte superior aparecerá un enlace directo a todas ellas. Empezamos con la Fase I, ir al supermercado y comprar tres botellas plásticas de cocacola medio litro. Fase II, bebérselas. Esta segunda fase me va a costar algo mas que la primera porque no soy muy amigo de la cocacola pero bueno, todo sea por cumplir un sueño.

Mirad que nos han plantado en pleno centro de Vigo (perdón por lo infame de la foto, pero el móvil al mediodía no da para mas):

Si señor, al ataque con un par. Oporto, un solo aeropuerto, tiene 56 destinos frente a los 20 que ofertan LOS TRES AEROPUERTOS GALLEGOS JUNTOS. A veces me pregunto si los entes encargados de gestionar los aeropuertos existen para algo, si por gestionar sólo se entiende conseguir que los aviones aterricen y despeguen o si realmente es que no queremos viajar. Sea como sea, el panorama es de tercer mundo total.

Desde hoy, Microsoft permite la descarga del nuevo Internet Explorer 8, con lo cual en vez de «Día de padre» podríamos nombrarlo «Día del lío padre» conociendo la asombrosa costumbre que tienen en sacar una y otra vez productos mal acabados, con problemas de instalación y mas agujeros de seguridad que un queso gruyere. Si una cosa me quedó claro tras trabajar muchos años en una empresa de informática es que nunca, nunca, nunca y repito, NUNCA, hay que ser el primero en usar nada proveniente de Microsoft justo cuando lo sacan al mercado dado que parecen haber eliminado el departamento de calidad y pruebas y ahora esa responsabilidad recae sobre el cliente. Es asombroso ver que tras meses y mas meses en el mercado siguen saliendo parches y mas parches para corregir problemas del Internet Explorer 7, como para fiarse del 8 ahora que está prácticamente en pañales.

Yo paso de asumir riesgos de forma gratuita. Los demás, avisados quedáis…

Si estás pensando en dar tus primeros pasos en internet para escribir lo que piensas o dar a conocer tus fotos al mundo, existen múltiples opciones gratuitas para ir empezando. Puedes dar de alta un blog en Blogger o en WordPress, puedes utilizar Flickr o si quieres mas florituras y tienes unos cuantos conocimientos de informática, puedes hacértelo todo a medida usando WordPress y plantillas variadas, o un fotoblog con Pixelpost, puedes tener tu propio nombre de dominio e incluso usar un hosting (alojamiento de webs) gratuito donde te permiten alojar una o varias páginas web sin coste. Si, como suena. Es mas, Galiciaenfotos empezó así gracias a Byethost. Llegado un punto contraté la versión de pago porque me parecía de bien nacidos ser agradecidos con ellos y los 24 euros que me cobran al año me parece de risa para todo lo que dan.

Esta fue la semana de los ejercicios, de los sustos y los cambios de planes. Por ejemplo, para entender cómo empezó la semanita, componer una frase con las siguientes palabras: «avería», «catastrófica» y «disco duro» para continuar otro con las palabras «avería», «catastrófica» y «coche». Empezábamos laboralmente con uno para las palabras «auditoría» y «calidad», finalizábamos con «actividad», «mental» y «negativa». Sin embargo, algo bueno debe haber. ¿Que nos tendremos que ejercitar con «comprar», «coche» y «nuevo»? Habrá que ser optimista y ver el otro lado de las cosas, pensar donde está la parte positiva (alguna habrá). Justo como ésta hoja, vulgar por delante, una magnífica modelo por su parte trasera. Una foto simple, lineal, colorida, de las que a mi me gustan.

Nos ha dejado un gran amigo, el Willy (Guillermito). Nuestro Golf, compañero incansable de aventuras por asfalto, arena, nieve y lo que se terciara durante los últimos catorce años. Un tornillo, un miserable tornillo que se soltó fue el origen de tal desastre en el motor que nos deja huérfanos de su compañía para siempre aunque no de su recuerdo. Descansa en paz Willy, nunca te olvidaremos.

Menuda racha llevamos últimamente, a ver si pasa de una vez. Ya sólo falta que se averíe mi cámara…

Cuanto mas tiempo pasa, cuanto mayor es el número de fotos que voy acumulando, mas enamorado estoy de la simplicidad, del menos es mas que forma parte de mi visión de la vida. Una línea, dos tonos de azul, dos pequeñas manchas blancas. Cuántos menos elementos en la imagen, mas te centras en lo que ves. Cuanto menos acumulas, mas disfrutas lo que tienes.

Como habréis podido comprobar, al lado de los comentarios ahora aparecen o bien unas imágenes (en mi caso un cerdito), o una G blanca tumbada sobre fondo azul. ¿Y eso qué es? Muy simple, en los blogs ahora se usa una imagen común (los llamados «Gravatares») para identificar visualmente a los usuarios. Si quiero tener un gravatar yo también, me voy a Gravatar.com, le digo «Sign Up» (apuntarse), pongo mi dirección de correo electrónico y subo la imagen que quiera en tamaño mas o menos pequeño. A partir de entonces en todos los blogs donde deje un comentario saldrá la imagen que asocié a mi e-mail para identificarme mas fácilmente. No mandan basura al e-mail y no hacen nada mas con la imagen. Sencillo, ¿verdad?

Hoy han sido las elecciones y el pueblo gallego, mayoritariamente, ha decidido que quiere un cambio de gobierno. El pueblo gallego ha decidido que no le gustaban las formas del gobierno actual y ha escogido cambiar. ¿Dónde ha estado el quid de la cuestión? Desde el punto de vista de una persona corriente como yo, Touriño no me ha parecido mal presidente pero gobernar lastrado por el bipartito le ha hecho mucho daño por los radicalismos del BNG y, sobre todo, de las juventudes nacionalistas en una tierra famosa por su moderación. El espectáculo de violencia mostrado en la manifestación de Galicia Bilingue hace un mes en Santiago a mas de uno le haría pensar si queríamos seguir por el camino de Euskadi o era hora de cambiar un rumbo equivocado. Sumándole a eso lo que cuesta hoy en día ganar cada euro, esos aires de nuevos ricos con dinero ajeno, Audis millonarios y paseos en yate, remató la faena. Estaban convencidos los gobernantes actuales de mantenerse en el poder pero olvidaron que los gallegos somos vengativos a la callada. No dimos señales previas, no nos dejamos amedrentar por las llamadas al miedo, los carteles con el «¿Quieres que vuelvan?» y les castigamos en silencio. La vida es así, ustedes se olvidan de nosotros, nosotros no perdonamos.

Este es el palacio de Rajoy, sede de la Presidencia del Gobierno gallego. En breve será residencia de Alberto Núñez Feijoó, desearle el mayor de los aciertos en sus decisiones y que nunca olvide que está al servicio de los gallegos, no los gallegos a su servicio ni que sus promesas electorales son promesas y como tales, deben ser cumplidas. Si no lo recuerda bien o prefiere no recordarlo, ya nos ocuparemos de refrescarle la memoria en próximas elecciones, porque esa será su casa mientras los gallegos queramos.

A estas horas, el presidente Touriño y Anxo Quintana reconocen la victoria electoral de Núñez Feijoó. Lo deseable sería que todos comprendieran que el pueblo gallego ha elegido y nos ahorraran tanto excusas de mal pagador como lloriqueos por el poder perdido para no reconocer lo que entre todos hemos decidido: tuvieron su oportunidad, no lo han hecho bien y no les queremos en el gobierno.

Porque estos días todo son elecciones, elecciones y mas elecciones, ganas tengo de que pase ya para por fin volver a disfrutar de esas entrañables noticias en el telediario de la TVG, que me ayuda a echar la cabezadita después de comer, del estilo de «abandonado un burro al lado del parque de bomberos de Lugo» o «cultivan una calabaza de cien kilos en Compostela», dos hechos que la MSN Encarta indica como un punto de inflexión en el devenir de la civilización occidental.

Además de esa sensación de feria diaria «Señora, yo le subo la pensión», «Señora yo se la subo mas y le regalo una manta zamorana» me está empezando a molestar sobremanera esos continuos intentos de meter miedo a los electores. ¡Cuidado! ¡No dejes que vuelvan! ¡Que quieren quitarle las pensiones a los viejos! Si tienes un programa electoral ilusionante y creíble no hace falta asustar a los demás para que te voten, los votos vienen solos. Intentar vivir gracias al miedo de los demás me parece triste, patético y penoso. Que yo recuerde, antes había unos que vivían bien, nos fastidiaban y nos subían los impuestos. Ahora hay otros que viven bien, nos fastidian y nos suben los impuestos. Pasadas las elecciones, me apuesto cualquier cosa a que seguiremos igual así que lo importante es tener salud (axioma gallego). No dejes que te asusten, no hagas caso de tanto slogan, tanta tele, ni tanta promesa destinada a ser incumplida. Analiza lo que te dicen y piensa por ti mismo cosas como éstas:

• ¿Qué te ofrecen? ¿A que ni sabes lo que te están ofreciendo?
• ¿Tienen pinta de ofrecerlo en serio o sólo por las elecciones?
• ¿Qué garantías dan de cumplir lo que prometen?
• Los que están ahora, ¿cumplieron lo que prometieron?
• ¿Qué han hecho los unos y los otros anteriormente?
• ¿Qué es lo que de veras les preocupa?
• En resumen, ¿quienes son los que menos te van a fastidiar?

Votes por quien votes, no lo hagas por miedo, sino por convencimiento. Y gane quien gane, si durante la legislatura te engañan, recuérdaselo para la próxima.